Coste y financiación

Los costes de las prioridades y estrategias políticas deberían presupuestarse teniendo en cuenta las realidades demográficas y económicas para asegurarse que sean realistas y alcanzables. Por consiguiente, la determinación de los costes de la implementación del plan sectorial educativo (PES) implica realizar proyecciones sobre tendencias en la población y en el sistema educativo, así como fijar objetivos de acuerdo con los diferentes escenarios políticos.

Modelos de simulación financiera

Los modelos de simulación financiera nos ayudan a informar a los responsables y órganos decisorios sobre la viabilidad de sus decisiones políticas. Están habituados a generar varios escenarios en función de diferentes metas y objetivos. Los escenarios reflejarán normalmente una mezcla de metas ambiciosas, moderadas y conservadoras en diferentes áreas.

Estos modelos son fundamentalmente hojas de cálculo, adaptadas de manera personalizada a las condiciones de un sistema educativo determinado, con fórmulas y relaciones propias para poder manipular fácilmente los datos. Algunos de los insumos básicos son los siguientes:

• Proyecciones demográficas: por edad o grupos de edad escolar;
• Parámetros educativos: tasas de matriculación, flujos de estudiantes, tamaños de clases, ratios de alumnos por docente, ratios de manual por estudiante, etc;
• Indicadores de desarrollo económico: crecimiento económico, porcentaje del producto interior bruto afectado al presupuesto público, porcentaje del presupuesto asignado a la educación, etc;
• Parámetros presupuestarios: costes unitarios, salarios promedios, etc.
• Costes específicos del programa: determinados por planes de acción presupuestados.

Dichos modelos ofrecen una proyección de la inversión requerida a nivel macro para conseguir un conjunto determinado de objetivos políticos mediante la estimación y agregación de costes en intervalos periódicos. 

Gestión de los déficits de financiación

Al estimar los costes del PSE debe evaluarse cuidadosamente la disponibilidad de los recursos adecuados para mejorar los resultados del aprendizaje. Los déficits de financiación se determinan comparando el coste estimado del plan con las proyecciones de los presupuestos nacionales y los recursos externos disponibles para la educación.

Por consiguiente, los modelos de simulación financiera son clave para garantizar que los planes de acción  presupuestados se encuentren dentro de los límites del presupuesto, y pueden poner de relieve la necesidad de una o varias vías de acción:

• compromisos presupuestarios que implican negociaciones y concesiones intrasectoriales o intersectoriales;
• repriorización o reescalamiento de los objetivos políticos;
• reconsideración y adaptación de las estrategias y programas;
• identificación de las áreas en donde se pueden conseguir ganancias de eficiencia, mediante un examen meticuloso de los costes unitarios;
• movilización de recursos adicionales mediante la promoción de los objetivos fundamentales.

Un escenario de referencia y un plan de financiación para las actividades y los insumos correspondientes con el objetivo de mejorar los resultados del aprendizaje deberían reflejar las conclusiones de un proceso colaborativo entre el gobierno (diferentes departamentos de los ministerios de educación y hacienda), agencias de desarrollo y actores locales.