Evaluación del plan sectorial educativo

La evaluación del plan sectorial educativo (PES) es un proceso que pretende ofrecer una opinión externa independiente de los contenidos del plan. Uno de los objetivos de una evaluación es apoyar o validar en último término el plan, pero también ofrecer una nueva ventana de oportunidad para mejorar su calidad mediante la formulación de las recomendaciones de los expertos.

El proceso de evaluación puede ser obligatorio cuando un país pretende solicitar financiación internacional, en cuyo caso es un paso más dentro del proceso de control de calidad administrado por la Alianza Mundial por la Educación (GPE). También puede ser voluntario, iniciado por los responsables políticos nacionales para ofrecer una nueva perspectiva, bajo la forma de una autoevaluación (por parte del equipo de planeamiento estratégico), evaluación interna (proceso de control nacional) o una revisión por pares (con la participación de funcionarios de ministerios de educación extranjeros).

En cualquiera de los casos, merece la pena tener en cuenta desde las primeras fases del planeamiento los criterios que se consideran fundamentales para determinar la credibilidad, coherencia, pertinencia y viabilidad de un PES. Algunos de ellos se aplican directamente a la calidad y el aprendizaje. Se organizan de acuerdo con lo establecido en las cinco dimensiones de las Guías para la elaboración de un plan sectorial de educación (GPE e IIPE-UNESCO, 2015):
1. liderazgo y participación,
2. solidez y pertenencia,
3. equidad, eficiencia y aprendizaje,
4. coherencia,
5. viabilidad, implementación y monitoreo.

La tercera dimensión, "Equidad, eficiencia y aprendizaje", ofrece varias sugerencias precisas en términos de cuestiones que los equipos de planeamiento estratégico podrían querer tener en cuenta a la hora de desarrollar estrategias para mejorar la calidad de los resultados del aprendizaje. Estas sugerencias son, entre otras:

• ‘¿Se han abordado con seriedad las dimensiones clave del ... aprendizaje para mejorar los resultados del sector?’
• ‘¿Identifica claramente el análisis sectorial las cuestiones claves relativas al ... del aprendizaje?’
• ‘¿Existen datos disponibles suficientes para evaluar: ... las mejoras del aprendizaje (calidad y disponibilidad de los insumos, resultados del aprendizaje)?’
• ‘¿Se abordan claramente en las estrategias y programas las dimensiones clave del … aprendizaje?’
• ‘¿Se abordan las cuestiones de la eficiencia relacionadas con el acceso, calidad y resultados del aprendizaje? ¿Existen evidencias de que las estrategias relacionadas con la equidad y la mejora del aprendizaje sean rentables y eficientes?'
• ‘¿Existen estrategias específicas para gestionar y subsanar los problemas del aprendizaje? ¿Hasta qué punto pueden los insumos relacionados con el aprendizaje (por ejemplo, número de horas de enseñanza, lengua de instrucción, materiales de docencia y aprendizaje, docentes cualificados) promover e incentivar mejoras en los procesos de aprendizaje del estudiante y en los resultados del aprendizaje?'
• '¿Hasta qué punto se puede esperar que los programas y acciones tengan un efecto de potenciación sobre los resultados del sector educativo en términos de … mejora del aprendizaje?

La evaluación será decisiva en el caso de que un país tenga la intención de acudir a la financiación internacional para implementar su PSE. De esta forma, los equipos de planeamiento se beneficiarán de la perspectiva más amplia de los países colaboradores del GPE. El primer objetivo del Plan Estratégico 2020 de las organizaciones es conseguir: ‘Mejores resultados de aprendizaje y más equitativos mediante una enseñanza y un aprendizaje de calidad’ (GPE, 2016: 7). Se presta una gran atención a los docentes como la manera inequívocamente más efectiva de mejorar el aprendizaje. En este sentido, los indicadores elegidos por la alianza miden la mejora de los resultados del aprendizaje, la calidad de los sistemas de evaluación del aprendizaje y la disponibilidad y distribución de los docentes formados. El GPE gestiona un modelo de financiación basado en los resultados, que promueve que los países miembros revisen sus políticas y estrategias para centrarse específicamente en los resultados del aprendizaje. Para recibir ayudas se exige como condición previa que el receptor cuente con un sistema operativo para monitorear los resultados del aprendizaje o contar con un plan con dotación presupuestaria para desarrollar uno.